Una de las paradas imprescindibles de Corea del Sur es la ciudad de Busan, en el Sur de país.

Para llegar a la ciudad tendremos dos opciones claras, el aeropuerto internacional de Busan, Gimhae Airport (IATA: PUS), muy bien comunicado con el centro de la ciudad mediante autobús (6000 wones «limousine Bus» o bus local por 1000 wones), tren (1500 wones) y taxi (unos 15.000 wones) y el tren de alta velocidad KTX que nos dejara en el centro de la ciudad (nosotros elegimos esta opción para viajar desde Gyeongju).

Busan es una ciudad en la que merecería la pena quedarse unos 3 días como punto intermedio en nuestro viaje para luego desplazarnos hacia la isla de Jeju. Vamos a poder visitar los templos de Beomeosa y Yonggungsa, la lonja de pescado de la ciudad, la isla de Dongbaek o la vibrante vida de la ciudad tanto de día como de noche. A nosotros nos gusto especialmente esta ciudad, que muchos consideran de paso…

Si vais en una temporada donde haga buen tiempo, la ciudad dispone de unas cuantas playas realmente bonitas como la de Haeundae o la de Gwangalli. También es parada obligatoria la visita al spa «Spaland Centum City» (Busan-si Haeundae-gu U2-dong Shinsegae Centum City 1F-3F, parada de metro de Centum City), más que un spa una ciudad en si mismo…

Pasados esos tres días en la ciudad, podemos tomar un vuelo de bajo coste a la isla de Jeju por un precio irrisorio